En los hoteles existe un curioso letrero que se utiliza en los picaportes de las puertas para expresar el deseo de no ser molestado, un pequeño cartoncito con la leyenda “Favor de no molestar” o en inglés “Please do not disturb” le hace saber a las personas en el exterior de la habitación que la persona en el interior no quiere ser molestada bajo ningún motivo.
Nosotros no tenemos letreritos mentales de “No molestar” y con frecuencia dejamos “pasar” pensamientos, comentarios, situaciones o actitudes de personas que nos sacan de balance y nos llevan a lugares incómodos e incluso nos restan energía y recursos para lo que si importa.
Estoy segura que puedes ubicar un momento en el que te encontrabas a gusto contigo, con la vida, con el momento que estabas viviendo, en el lugar en el que estabas y algo rompió ese instante, una persona con un chisme, un mensaje, una noticia en los medios, un post en alguna red social, un recuerdo, un pensamiento negativo, y entonces ¡zaz! No sólo se rompe el equilibrio y la tranquilidad en tu persona sino da inicio a una dinámica en la que rápidamente se puede ganar intensidad, negatividad, drama, pensamientos negativos y emociones que fácilmente se pueden desbordar.
¿Qué pasaría si de principio identificamos esas situaciones a las que le vendría bien el letrerito de “favor no molestar”?